El pasado domingo 2 de octubre se llevó a cabo las elecciones presidenciales en Brasil que dio por ganador a Lula Da Silva aunque se realizará, a fin de mes, la segunda vuelta. Este medio consultó sobre la jornada a Gustavo Segré, analista internacional y socio de Center Group sobre la elección y comentó que esta se desarrolló con total normalidad, “no hubo ningún caso de violencia como se había especulado desde la prensa. Se observó un resultado mejor de lo que reflejaban las encuestas por parte de Bolsonaro. Ninguna encuestadora mostró a Lula por debajo del 50% ni a Bolsonaro por arriba del 37%” y continuó “los debates, para lo que resta de campaña será centrado en ellos dos, en la primera vuelta se incluía a los demás candidatos y de esta manera dispersaba la atención. A partir de ahora es uno contra el otro. Lula arranca con la ventaja de 5.000.000 de votos de diferencia, Bolsonaro cuenta con la ventaja de tener la caja de la presidencia de la república y el estado”.

A su vez explicó que la composición del senado es favorable a Bolsonaro y esto da tranquilidad a los mercados. También dijo que para el gobierno argentino no habría una mejor posición de que Lula gane porque “podría proveer canje el año que viene para mejorar la situación electoral y disputar un 2023 con un poco de perspectiva de victoria”.